María y José, José y María, llenan este domingo, aunque el centro como siempre, sea el Emmanuel, el “Dios con nosotros”. María es la disponible y José el necesario. Por medio de José, Jesús pertenece y entronca, con la gran promesa que Dios ha hecho a su pueblo en Isaías y los profetas.
Ya estamos pendientes de la llegada de nuestro Niño Dios. Nos queda una semana para este acontecimiento. Preparemos nuestros corazones para esta venida que nos cambiará nuestra vida.
Este es el enlace de las lecturas de este domingo.